- ½ kilo de morcillo
- ½ kilo de panceta
- Una trasera de pollo
- Un codillo
- Una manita de cerdo
- Un chorizo Ibérico
- Una morcilla ibérica o asturiana.
- ½ kilo de garbanzos
- Tres varas de apio
- Un puerro
- Un nabo
- Tres cebollas moradas
- Un tomate
- Aceite de Oliva virgen extra
- Sal
- Tres ramitas de yerbabuena
- Una copa de oloroso.
- Pan rallado.
- Harina.
- Dos huevos
- 12 horas, al menos, antes de empezar la receta, meter los garbanzos en una olla con agua templada y sal.
- Con las carnes y los garbanzos, el apio, el puerro, el nabo y una ramita de yerbabuena, hacer un cocido tradicional, salándolo con mucha prudencia, ya que hay elementos que aportan sal suficiente (Sobre todo si el codillo que echemos está en salmuera). Cuando esté hecho, separar las carnes de las verduras y los garbanzos (Que pueden haberse cocinado metidos en una redecilla de cocción). Reservar el caldo de la cocción.
- Aparte, cocer el chorizo y la morcilla para que no aporten su grasa al cocido.
- Una vez que todos los elementos cocidos se han enfriado, picar las carnes y los embutidos y dejarlos mezclados en un cuenco. Aparte, triturar con un tenedor los garbanzos e ir añadiéndolos poco a poco a la mezcla de carne picada hasta que tenga una consistencia que permita hacer bolas que no se desmoronen al freírse. Si no se desease incluir mucho garbanzo triturado, también se puede añadir menos e incorporar uno o dos huevos a la amalgama y la cantidad de pan rallado necesaria para darle la consistencia necesaria, a la manera tradicional.
- En una sartén echar un chorreón de aceite de oliva virgen extra y rehogar la cebolla, previamente picada. Cuando esté dorándose la cebolla, echar el tomate, también picado. Cuando esté suficientemente sofrito, echar troceadas las verduras que sirvieron para hacer la berza y dejar sofreír cinco minutos más.
- Incorporar al sofrito el caldo sobrante de la cocción y una buena copa de oloroso y triturarlo todo lo mejor posible para que quede una salsa untuosa.
- Una vez hecha la salsa, salpimentar y echarle la yerbabuena restante y poner en una sartén, manteniéndola a fuego suave sin que hierva.
- Entretanto, se habrán hecho bolas con la carne picada, Se pasan por harina (O por huevo y pan rallado, a discreción. Todo depende de la consistencia que se le haya dado a la masa) y se fríen en abundante aceite caliente. Tras sacarse del aceite, se ponen en papel secante y, una vez despojadas de todo el aceite sobrante, se van echando en la sartén con la salsa para que se ensamblen los sabores. Se mantendrán a cocción suave unos veinte minutos.
- Para acompañar se pueden hacer las clásicas patatas fritas bastón o un arroz blanco o, si se tiene tiempo y ganas de prepararlo, un arroz pilaf. Pero para poner colofón al homenaje albondigar a la berza o cocido, se pueden escalfar durante un minuto unos tallos troceados de tagarninas, se enfrían en agua salada y se enharinan, friéndose seguidamente como si fueran patatas.